La habitación tenía un balcón encantador.

La ubicación es ideal para visitar los

principales museos y atracciones. Las camas eran muy cómodas y la limpieza del hotel fue satisfactoria. Sin embargo, la falta de ascensor y el diseño laberíntico del hotel pueden ser un inconveniente para algunos huéspedes.

La máquina de café es un lujo

Disfruté de una habitación amplia y limpia, muy cómoda, con una máquina de café que te despierta con alegría. Además, el personal fue siempre amable y servicial.

Aunque la ubicación es buena, las escaleras son un desafío sin ascensor, lo que podría ser complicado para algunos. Además, un par de noches sufrí un poco de ruido temprano.

a un paso de los museos y del hermoso vondelpark

La ubicación del hotel facilitó mis paseos por Ámsterdam ya que se encuentra a menos de una caminata de cinco minutos del impresionante Vondelpark, un lugar perfecto para disfrutar de un momento de tranquilidad en medio de la naturaleza, además, está a pocos minutos del Museo Van Gogh, que pude visitar fácilmente durante mi estancia.

El café a disposición es un gran detalle. La habitación tenía un mal olor.

Aprovecha el servicio de bicicletas para recorrer la ciudad. es una excelente manera de explorar y disfrutar de Amsterdam.

Hemos pasado una estancia de tres noches muy agradable. La habitación era amplia y limpia, con una cómoda cafetera Nespresso que nos hizo sentir como en casa. Además, el hotel está muy bien situado, lo que facilita visitar los principales lugares turísticos.

Las escaleras son empinadas y carece de ascensor.

Buena ubicación y fácil acceso al transporte público. El hotel tiene un toque encantador por dentro, con la decoración de caballos que alegra el día. ¡Café y té disponibles todo el día!

El aire acondicionado parecía estar de vacaciones también, fue un saunario en lugar de habitación. 😅

el personal de Iron Horse fue muy servicial cuando tuvimos problemas con la caja fuerte (nos ayudaron rápido). la ubicación es perfecta, se puede llegar andando a muchos museos y lugares interesantes en una zona tranquila.

el desayuno podría mejorar un poco 🍽️.

La habitación era super amplia y cómoda, ¡nos encantaría volver! 😍 Aunque no tienen ascensor, el personal fue muy amable. La limpieza podría mejorar, ya que no cambiaron las sábanas en 4 días.

El hotel tiene una buena ubicación cerca de los museos y del transporte público. La habitación era cómoda y ofrecía una máquina de café, lo que fue muy apreciado. Sin embargo, la limpieza dejó que desear y no se realizaron cambios de sábanas durante la estancia, lo cual podría mejorarse.

La ubicación es conveniente, con fácil acceso a tranvías que llevan a las principales zonas turísticas, todo a poca distancia caminando. La habitación Twin Souterrain cuenta con una máquina de café que hace la estancia más cómoda, ideal para esos días fríos de Ámsterdam.

Sin embargo, el acceso a las habitaciones puede ser complicado para personas mayores o con problemas de movilidad, sobretodo por las escaleras empinadas. Además, la limpieza podría mejorar. encontramos restos de comida en la pared al llegar y el servicio de limpieza no pasó a hacer la habitación en una tarde, lo que puede ser decepcionante para algunos.

La ubicación del Iron Horse Hotel es excelente, cerca del barrio de los museos y de paradas de transporte. La habitación era cómoda y contaba con todos los elementos necesarios, incluido un buen servicio de limpieza. Las chicas de recepción fueron muy amables, dándonos consejos útiles sobre la ciudad. Sin embargo, noté que el aire acondicionado tenía problemas. durante una ola de frío, la habitación no se calentaba lo suficiente. Además, el acceso a la habitación podía ser complicado, especialmente para personas mayores, debido a las escaleras empinadas. A pesar de estos inconvenientes, la experiencia fue positiva gracias a la accesibilidad a los puntos turísticos y el confort general de la habitación.